En solitario, logró levantar una torre de hierro emulando al famoso ícono de París, en la pequeña localidad cordobesa
Claudio Marchetti, un vecino de la localidad de Alicia, en el este de la provincia de Córdoba, dedicó más de dos años de su vida a erigir una réplica de la Torre Eiffel en el patio de su casa. Con sus propias manos y sin ayuda externa, Marchetti trabajó día y noche para completar una estructura que ya se convirtió en un hito local.
La “Torre Alicia”, como la llamó, mide seis metros de base por 31,60 metros de altura, una escala de 1:10 en comparación con la original parisina. Marchetti, quien comenzó este proyecto el 10 de mayo de 2022 sin haber visto nunca la torre real, soñaba con visitar París mientras construía su versión en miniatura.
“El desafío me atrajo”, confesó el artesano, quien realizó 8.000 cortes de hierro y ensambló 86 piezas abulonadas y numeradas, todas colocadas en altura y por él solo. La torre no solo es una proeza de ingeniería, sino también una obra de arte, y Marchetti a sus 57 años, demostró que, con pasión y perseverancia, los sueños pueden tomar forma.
De este modo, además de concretar su sueño, marcó un récord. Se estima que hay alrededor de 60 réplicas de la torre Eiffel en el mundo. Estas varían en tamaño y fidelidad al diseño original y se convirtieron en atractivos en sus respectivas ubicaciones. Pero la de Marchetti, concluida el 27 de junio, es la única erigida por una sola persona. Y ahora la puso en venta.
Materiales y tiempo
En total, la construcción demandó 26 meses de trabajo ininterrumpido. La torre está compuesta por 10 toneladas de hierro, y cada una de las piezas fue hecha a mano por Marchetti. Fue pintada con tres capas de antióxido y tres de pintura sintética.
Su dedicación y habilidad manual permitieron que esta réplica sea desmontable, con la idea de trasladarla eventualmente a un lugar público y turístico. Mientras tanto, permanece donde fue erigida, en el patio de su vivienda, en la localidad del sur del departamento San Justo, en la pedanía Juárez Celman, a unos 245 kilómetros al noroeste de Rosario.
Un legado de hierro
La Torre de Alicia no es solo un tributo a la ingeniería francesa, sino también un símbolo de la tenacidad argentina. Marchetti, con su obra, dejó una huella imborrable en la historia de Alicia e inspiró a muchos a seguir sus pasiones, sin importar cuán grandes sean.
Además, transformó el paisaje de Alicia con su trabajo, una estructura de casi 32 metros que se observa desde todos los puntos de la localidad, de alrededor de 4.500 habitantes.
La magnitud del proyecto generó un sentido de orgullo y curiosidad en la comunidad local. La “Torre Alicia” fue recibida con entusiasmo y admiración por los vecinos y se convirtió en un punto de interés tanto para los residentes como para visitantes de áreas cercanas.
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Fuente: diario La Capital